martes, 7 de abril de 2015

PIZARRA. Algo que escribí...

PIZARRA
Algo que escribí hace tiempo...
 
En mi escuela me gustaría que dedicásemos más tiempo a escuchar a los niños  y conseguir que ellos dedicasen más tiempo a  pensar, expresar… que fueran los personajes principales de la escuela reflexionando, planeando y decidiendo en qué involucrarse, cómo y cuando, con más responsabilidades  ante aquello que decidan hacer.
Debemos  incluir el mundo emocional en el día a día, valorar el ambiente grupal y las relaciones.
 Valorar el invento como forma de aprendizaje así como también la experimentación y la creatividad y ya que se empieza a hablar de creatividad en otras áreas trabajarla  para fomentarla y poder emplearla.
Me gustaría también que mi escuela fuera un lugar que ofreciera oportunidades para enriquecer la formación artística y capacitar para poder producir y disfrutar de  las expresiones estéticas.
¡Y por pedir que no quede! me gustaría que a partir de los 6 años el lenguaje oral y escrito no se convirtiera en casi  única base de aprendizaje, quedando relegado el lenguaje plástico a la mínima expresión, sin importarnos siquiera que lleguen a perder  avances conseguidos  en años anteriores, en cuanto a lenguaje plástico se refiere.
¡Dicen! que el teatro es un poderoso recurso persuasivo para la didáctica y divulgación de las matemáticas por el poder y la capacidad de asombrar al poner en escena conceptos que se consideran abstractos, de atraer la atención, de motivar el interés y por tanto se convierte en herramienta inmejorable para la divulgación científica, la escuela debe

potenciar   todo tipo de comunicación: verbal, corporal, visual, musical, plástica y matemática…
Sería interesante también, ser capaces de no perder de vista los cursos  colindantes sin dejar de mirar el nuestro, me refiero a aquello que hacen los cantantes de un coro para conseguir  empastar  ese cúmulo de voces distintas y que finalmente suene bien: escuchar  al compañero de nuestra izquierda y al de nuestra derecha para conseguir  ese empaste, esa continuidad y coherencia  necesaria para los alumnos/as a lo largo de la etapa .
Una buena y fructífera relación con las familias es fundamental, siempre y cuando sea posible.
Sería muy deseable, a la par que relajante  poder realizar  las evaluaciones con unos criterios comunes.
 
Y ahí va una frase bonita para todos: “Vivir la cotidianidad en la escuela amarrando con un mismo hilo lo de pensar y lo del sentir, lo de aprender y lo de estar juntos, lo de ser inteligentes con lo de ser gente”

Leí que  “Más de la mitad del cerebro humano se dedica al proceso de ver y de interpretar lo que se ve…. Hacer que un fenómeno sea visible es ampliar extraordinariamente nuestra capacidad para comprenderlo “. En la escuela debe haber un espacio amplííííííííísimo para exposiciones de todo tipo porque ¡!dicen!!!!

que una forma interesante y atractiva de divulgar las Matemáticas es mediante la organización de exposiciones, exposiciones de imágenes de objetos, de líneas, de formas, de acertijos, de textos, que tienen como objetivo captar la atención e interesarnos.
 
FIN
 
                                                          Fdo: Rita La Cantaora


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